BUENOS AIRES.- Una vez sentado al costado del presidente Daniel Angelici y al frente de los micrófonos, Daniel Osvaldo supo que el momento de la presentación oficial como jugador de Boca había llegado. Sin embargo, en lo que duró la conferencia de prensa, el delantero no pudo evitar que su faceta de fanático/veneno del “xeneize” fuera lo más destacado.

“Sería una puñalada al corazón que me vaya mal con esta camiseta”. Con esas palabras “Dani” dejó todo más que claro. Pero siguió: “La cancha de Boca es la más linda del mundo, nunca vi nada igual. Cuando entrás, y ves esa gente, es algo único. De chiquito era hincha, tengo el recuerdo que quería venir y no me dejaban y me escapaba. Pero tenía un amigo que era socio y él me llevaba”, contó el ex jugador de Italia.

A la hora de adjudicarse un nuevo apodo como hombre “xeneize”, Osvaldo reconoció ser un “Loco” (como lo llamó el propio Rodolfo Arruabarrena), pero prefirió evitar las comparaciones y dejarle el apodo a Martín Palermo, jugador que tiene entre sus ídolos, junto con Riquelme y Tevez. “Román me gustaba mucho”, contó el delantero, mientras espera coincidir con el “Apache” en La Bombonera, vistiendo ambos la azul y oro. “Sería imaginarnos mucho más allá. Vamos por pasos, a concentrarnos en este presente. Luego, Dios dirá”, avisó.

“Dani” dijo que jamás esperó tremenda repercusión con su llegada, y ya sin jugar le agradeció el cariño a los hinchas que esperan sus goles cuanto antes.

Amenazado

A todo lo bueno que se vivió con la presentación de Osvaldo, Angelici le agregó un detalle para nada agradable al reconocer que fue amenazado por barras y le pidió al Estado que actúe para erradicar a los violentos. “Tienen las herramientas para saber y prevenir. Uno no puede poner el derecho de admisión así porque si, porque después (los barras) te ponen una cautelar o denuncian por discriminación”, señaló. “Recibo amenazas, he cambiado las líneas de teléfono de mi casa, amenazaron a mis hijos. Uno quiere al club, trabaja por pasión, pero tampoco estoy para poner en riesgo a todo lo que tengo”, apuntó el dirigente sobre un tema que parece nunca acabar y que para nada puede pasar desapercibido. (Especial-DyN)